En diciembre 'Caza y Setas' en Alcalá de Henares

Los 25 restaurantes de la asociación de hosteleros Alcalá Gastronómica visten su cocina de temporada con platos que vienen del monte. En diciembre, ‘Caza y Setas’.

Basta asomarse a la ventana para darnos cuenta de que ya no es que lo diga el calendario, es que las temperaturas ya no disimulan. El invierno llama a la puerta pidiendo paso. Y con él, la última propuesta del año en el calendario culinario de Alcalá Gastronómica – Fomentur. Se trata de aquella que ‘cocinan’ a fuego lento sus restaurantes asociados para ofrecer a alcalaínos y visitantes un programa anual que alimente, a su manera, la amplia oferta turística de la ciudad de Cervantes. Y ¿con qué cierra la asociación la agenda de 2019? Con sus jornadas gastronómicas dedicadas a la caza y a las setas. Una iniciativa que nos acompañará durante todo el mes de diciembre.

‘Caza y setas’ es, de nuevo, una clara apuesta de la cocina local, a través de los 25 restaurantes que integran la asociación de hosteleros, por los productos de temporada. Una cita que gana seguidores, aún en un mes en el que los menús navideños, las cenas de empresa, las comidas con amigos y las reuniones familiares tienen su merecido protagonismo.

cocina de temporada con productos del entorno

Alcalá Gastronómica – Fomentur es una asociación integrada por una familia de asociados que va en aumento y que refleja la amplia y variada oferta de Alcalá de Henares en gastronomía. No es para menos, viniendo de una Ciudad Patrimonio de la Humanidad que recibe la visita del perfil más heterogéneo de turistas. Sin embargo, también es una asociación que siente apego por su entorno tanto en la elección de los productos con los que elaboran sus platos como de los caldos que bañan las copas al apostar en numerosas ocasiones por bodegas de la región, por vinos de Madrid. Las jornadas dedicadas a la caza y las setas ilustran de manera muy gráfica este afán. Y es que saben bien aprovechar los productos de caza y la reseñable variedad micológica que ofrece su entorno natural.

Sin más, es momento de disfrutar de una caldereta de jabalí o ciervo, de una codorniz escabechada, unos fabes con liebre o un conejo al ajillo; de champiñones, boletus y níscalos; de las recetas más tradicionales y, por supuesto, también de las más innovadoras. ¿Dónde?